miércoles, 5 de febrero de 2014

¡Ay Roma! Ciudad de sol..... Ahh no, espera


Al final he cedido a la presión popular y he comenzado con esto del Blog que tanto se lleva entre los Becarios Icex. Esta primera entrada, que espero que sea la primera de muchas, se la voy a dedicar a lo que más me ha sorprendido hasta ahora de la ciudad.........la lluvia!!!!!!!!!!!! Porque aquí llueve, y mucho!! No un poquito por eso de que es normal, es invierno...etc.etc.etc........MUCHOOOOOOOOOOOOOO!!!!! 

En casi un mes que llevo aquí, con sus 30 días completitos, SOLO 1 (WTF!!!!!!) he sacado las gafas del sol del bolso. Vale que yo solo conocía la ciudad en los meses más amables, pero vamos, termino medio, ¿no? Y justo cuando te estas quejando es cuando aparece algún romano y te dice: "¿Pero claro que llueve, por qué te crees que la ciudad es tan verde?".  Momento en el que miras a tu alrededor, ves todo lleno de vegetación, y dices para tus adentros eso de Ohh Fuck, es verdad!!

Yo, acostumbrada a los pantanos resecos de Madrid, al solecito invernal............ Eso si, no veáis cómo estoy mejorando la técnica del salto de la gacela (ese salto necesario para evitar los charcos junto a las aceras).....un estilo....da gusto verme!!

Y qué decir los paraguas.....a mi esto me parece un invento del demonio!! Además de incómodos de llevar (no sé a vosotros, pero a mi se me cansa el brazo), su uso no es sencillo. Aprovecho la coyuntura. Puntualizaciones sobre el uso del paraguas en la gran ciudad:
  1. Si el espacio es estrecho y te encuentras con otra persona emparaguada en sentido contrario se masca la tragedia.....uno de los dos terminará cediendo, o lo que es lo mismo, terminará llevando su paraguas hacia un lado. Conclusión: te mojas!
  2. En ciudad como Roma, dejar tu paraguas en los paragueros a la entrada de tiendas, restaurantes...etc. es un acto de fé. Lo más probable es que a la salida te hayas quedado sin él, por tanto o haces tu lo propio y robas otro, o tu verás. Conclusión: si eres buena gente...te mojas!
  3. Y por último, a ver...cuando mides casi 1.80 como es mi caso, la mayoría de los paraguas del mundo se quedan a la altura de tu cara, bien, correcto.......esto provoca que el hilillo de agua que cae de los paraguas ajenos se vaya directamente contra tu persona. Recordemos además que el diablo en su sabiduría le puso a los paraguas esas estupendas varillas metálicas...... Conclusión: te mojas y te puedes quedar ciego de un varillazo!
En resumen querida gente, me encanta esta ciudad, estoy feliz como un perdiz en mi nueva patria (ya habrá posts positivos, no se me revolucionen), pero el tema lluvia a sido la sorpresa non-grata de la aventura!

Hasta la próxima!!!!

Cris